El Juego Oasis es un evento de dos días, que invita una comunidad a proyectar y construir de forma cooperativa un proyecto desafiante escogido por los habitantes para satisfacer sus necesidades, como una plaza, un parque, una guardería infantil o un centro cultural. El juego considera una definición amplia de comunidad y envuelve representantes de diferentes sectores de la sociedad – ONGs, gobierno municipal, así como habitantes de otras partes de la ciudad.
La idea atrás del nombre Oasis viene de los libros de historia: un oasis ofrece esperanza, refugio y estabilidad para viajeros cansados en el desierto. Nuestro mundo está lleno de vastos “desiertos”: regiones y comunidades donde, social y/o ambientalmente, la vitalidad fue destruida. Pero, en esos lugares, aún existen inevitables puntos de luz llenos de esperanza, belleza y alegría. El Juego Oasis tiene la intención de hacer más de esos puntos de luz por el mundo, sea creando nuevos o expandiendo los que ya existen. Una comunidad puede trabajar junta de forma cooperativa, imaginativa y rápida para construir un día un oasis moderno: un espacio físico que promueva vida, alegría y restauración.
El Juego Oasis es una destilación de Guerreros sin Armas, con énfasis en la comunidad. Como en el Guerreros, el Juego Oasis visa despertar y cultivar un espíritu de emprendimiento social cooperativo en los miembros de la comunidad, pero también enfatiza el estímulo a la comunidad en sí. Bajo ese aspecto, dos de los principales objetivos son restaurar y/o fortalecer las relaciones y conexiones afectivas que unen una comunidad; y cultivar una percepción de oportunidad y de responsabilidad de cuidar de las personas y del ambiente a su alrededor.
Un Oasis…
- Estimula y habilita grupos para cooperación y emprendimiento de grupo y comunitario;
- Promueve el mirar apreciativo y amplía la capacidad de cada uno proponer soluciones creativas para las cuestiones críticas de nuestra sociedad, de nuestro barrio
- Detrás de lo cotidiano de los participantes la percepción que es posible transformar el mundo sin sufrimiento; sin comprometer su libertad o autonomía y aún hacer todo con mucho placer;
- Promueve la práctica de valores humanos como: respeto, compasión, cooperación, aceptación de diferencias etc.;
- Amplía el nivel de información sobre estrategias de sustentabilidad ambiental y auto construcción;
- Restaura o construye un sueño comunitario, pudiendo ser replicable.
Tomado de www.elosbrasil.org
