miércoles, 16 de marzo de 2011

Mirada apreciativa y Afecto: en busca de las bellezas y las historias del barrio.


Mariela nos ha recibido en su casa ya varias veces. Vive con su esposo y sus cuatro hijos, Michael (o Maicol?), Geraldine, Lizbeth e Ingrid, de 14, 12, 9 y 7 años respectivamente. Trabaja con su esposo, comprando y vendiendo chatarra y también, a veces, sale en la zorra de su comadre Lucía a seleccionar materiales para reciclar en algún barrio de la zona sur de Bogotá.
Es una mujer muy amable y despierta, y como casi todos los vecinos que hemos conocido, es una persona sencilla y abierta. No se reserva nada a la hora de compartir, ni cuando le preguntamos cualquier cosa que quisiéramos saber sobre su vida.
Así como Mariela, muchos de los vecinos de los barrios Girardot y Ramírez nos han abierto las puertas de sus casas y de sus vidas, contándonos historias de su barrio, sus trabajos y sus familias.
Desde ya comenzamos a percibir en las expresiones de algunos de los habitantes todo el potencial que tienen para soñar, y esperamos que estos sueños que rondan sus cabezas empiecen a tomar fuerza y a volverse cada vez más reales y posibles.

Estamos seguros de que con estas pocas palabras ya pueden imaginarse que una de las bellezas más notables que tienen el Ramírez y el Barrio Girardot, es la calidez de sus habitantes... las risas y los ojos llenos de luz de sus niños, la honestidad de sus historias.

Próximamente les contaremos mas... Prepárense pues solo faltan 10 días para que entre voluntarios y comunidad proyectemos el sueño colectivo.

Primeras actividades

Durante las última semana hemos visitado el barrio cuatro veces con el equipo de voluntarios.

Los barrios El Ramírez y Girardot, son dos sectores pequeños de la localidad de Santa Fe, cerca del barrio Las Cruces, donde la mayoría de sus habitantes son recicladores de oficio. Es una comunidad muy humilde y desde el primer día las personas nos han abierto las puertas de sus casas y han estado bastante receptivas y abiertas para conversar con nosotros.

En este momento nos encontramos en la fase de la mirada, acercándonos a la comunidad y buscando cuales son sus bellezas y recursos. Los voluntarios han desarrollado algunas actividades que les han permitido afinar su percepción de la abundancia y tener un mayor sentido de confianza y pertenencia con la comunidad.

En las próximas semanas estaremos visitando el barrio casi que a diario, pues los días de Manos a la Obra se acercan a pasos gigantes.

Visite nuestro cronograma para saber las próximas actividades que vamos a desarrollar, y espere fotografías del proceso y las historias de las personas de la comunidad.